Veintitrés personas desaparecidas tras partir en yola hacia Puerto Rico

En Higüey, provincia La Altagracia, la comunidad se encuentra angustiada y desesperada tras la desaparición de veintitrés personas que emprendieron un arriesgado viaje en yola hacia Puerto Rico el pasado ocho de julio. Los familiares de los desaparecidos, provenientes en su mayoría del barrio Villa Cerro, Higüey, y otros cuatro de la provincia de San Francisco de Macorís, están clamando por respuestas sobre el paradero de sus seres queridos.

Entre los desaparecidos, se cuentan veintiún hombres y dos mujeres, cuyos nombres han sido revelados por los familiares en su búsqueda desesperada de información. Algunos de los nombres incluyen a Joander Castillo Calderón, Ricki Jonael Mota, Benjamín Santana, Manuela del Rosario, Robert Ortega Hidalgo, Elin Manuel Román, José Reyes, Daniel Reyes, Benjamín Hierro, Wilian Omarki Hernández, Wilfrido Antoine, Dahiana María de la Paz Regalado, Nelson Custodio Lebrón, Jhon Starlin Columna de la Cruz y Darguin Martínez Cedeño.

Los familiares han expresado que han vivido días de incertidumbre y dolor, sin tener información concreta sobre el paradero y la situación de sus seres queridos. Aunque se presume que partieron desde la parte este del país, específicamente desde la zona de Bayahíbe, no hay certeza al respecto. Ante la falta de respuestas, los parientes afectados han acudido a las autoridades, levantando la denuncia en la Policía Nacional para solicitar su apoyo en la investigación de este caso.

Kimberly Peña, esposa de uno de los desaparecidos, ha compartido que han realizado búsquedas en diferentes lugares, incluyendo Juanillo y La Romana, e incluso han solicitado información a instituciones como el M-2 de la Armada y han investigado fuera del país, sin obtener resultados certeros. Según Kimberly, su pareja le confesó que emprendería este viaje de manera ilegal, y que el punto de partida sería Bayahíbe, saliendo en la madrugada del sábado ocho de julio.

La comunidad de Villa Cerro se mantiene consternada y preocupada por el destino de estos veintitrés valientes aventureros, quienes se embarcaron en esta peligrosa travesía en busca de una vida mejor. Mientras tanto, los familiares siguen exigiendo respuestas y apoyo en la investigación para esclarecer el paradero de sus seres queridos. La incertidumbre y la angustia se apoderan de esta comunidad, que espera ansiosamente noticias que les brinden alguna esperanza y tranquilidad.

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